sábado, 23 de abril de 2011

Érase una vez un hada posada en un árbol...

Aquí viene la segunda parte de la pintura del dormitorio para la "princesita". En la pared lisa que previamente habíamos pintado de fucsia, Nerea quería que le dibujase, principalmente, un hada.

Así que, con esa idea, busqué algún otro dibujo que junto con el hada pudiera rellenar bien el espacio de la pared.

Al final, éste fue el resultado: un árbol con un hada posada en una de sus ramas y unas maripositas reboloteando a su alrededor. ¿Qué os parece?

Para hacer el troco y las ramas del arbol, perfilé la silueta con cinta de papel adhesiva y rellené el interior con pintura gris oscura, el color que elegí para hacer el diseño.
En el diseño del árbol iban hojas, mariposas y unos circulitos. Preparé plantillas de papel para esos tres elementos que fui calcando en la pared para luego pintarlo.
Ufff, esta fue la parte mas dificil del dibujo: pintar el hada. El resto de dibujitos podian quedar inexactos o un poco diferentes, pero el hada tenía que quedar perfecta!

Y este fue el resultado final.


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